En la catedral de Sigüenza se encuentra la talla de la Virgen de la Mayor, patrona de la ciudad. Durante la Guerra de la Independencia los franceses saquearon la catedral, sustrajeron la plata y echaron al fuego la talla de la Virgen de la Mayor. En el libro Sigüenza, 1808-1815 el manuscrito que narra la guerra de la Independencia en Sigüenza de Manuel Lafuente Ángel y Diego Moreno Róquez indican que una mujer consiguió rescatar la cabeza de la virgen del fuego ya que el cuerpo se quemó. Con la cabeza volvieron a hacer otra nueva. En la actualidad, si uno se fija en la cara de la virgen, puede ver la señal del sablazo que le dio un soldado francés